jueves, 7 de octubre de 2010

Ni creamos, ni destruímos.

Estos versos
me hacen más falta
-ahora-
que una bicicleta
pero
se quedan pequeños
al lado
de pedalear
las subidas
y bajadas
del día a día.

Aquel cigarrillo
volteó más de una vida
y ahora
sólo pido
que este fuego
no se apague
ni en días
de lluvia.

Desde
tiempo cero.
Hasta
que sumes
lo suficiente.

Ahora
o
antes.
"Ayeres"
contra
mañanas.

Todo
es relativo.

No
existe
nada
insustituible,
aunque
tarde
en llegar.

Lavoisier
lo dijo
un poco
más fácil:

Todo
se
transforma.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pero creo en ti.
Eres.
Me basta.